El académico analizó los resultados del último Minerobarómetro con socios de Voces Mineras A.G.

Interesados en conocer en mayor detalle los resultados del Minerobarómetro 2019, encuesta de percepción realizada por Mori en conjunto con la Universidad Católica de Chile, los socios de Voces Mineras A.G. participaron de un encuentro con el académico Gustavo Lagos, quien analizó cómo ha evolucionado la valoración y conocimiento que la ciudadanía tiene de la minería.

El estudio abarcó un total de 1.540 encuestados a nivel nacional, además de muestras especiales –con entrevistas a 200 personas más en cada una– en las regiones de Antofagasta y Atacama.

A pesar de una tendencia a la baja –desde 2013– en la percepción favorable que los chilenos tienen de la minería, la industria se mantiene como la mejor calificada, con un 40% de las preferencias.

Desde el término del súper ciclo la inclinación a trabajar en minería ha ido disminuyendo, pero manteniéndose estable los últimos años entre 36% y 37% de las preferencias.

Asimismo, un 47% de los entrevistados dice estar satisfecho con la contribución del sector minero al desarrollo de Chile, mientras el 67% cree que la minería seguirá siendo la principal actividad económica del país.

Desconocimiento

Con todo, el conocimiento que la población tiene de la minería es bajo. De acuerdo con lo expuesto por Gustavo Lagos, la mayoría conoce a Codelco, pero confunde una de sus divisiones (Chuquicamata) con una empresa; de las compañías mineras privadas se sabe poco y, en general, muchos desconocen el origen de las empresas, sin son nacionales o extranjeras. “El nivel de conocimiento es pobre”,  expresó el académico.

Para los encuestados, el principal problema que tiene la minería es medioambiental. En ese contexto, un 13% menciona el consumo de agua por parte de la industria, y otro porcentaje similar alude a la contaminación ambiental. “Hay una percepción generalizada de que la minería consume más agua de la que necesita y que contamina”, afirmó Lagos, cuando por el contrario, la industria ha disminuido su consumo de agua fresca, aumentando el uso de agua de mar y la reutilización del recurso hídrico.