Fenix Gold: el nuevo proyecto que empezaría a producir oro a inicios de 2026
Según un estudio preliminar del equipo técnico de Rio2, Fenix Gold tiene un potencial de expansión desde las 20.000 tpd de su primera fase, hasta una tasa de extracción de mineral de alrededor de 80.000 tpd.
Ubicado en el Cerro Maricunga, comuna de Copiapó, Región de Atacama, el proyecto Fenix Gold completará su construcción en noviembre del presente año, para obtener su primera producción de oro en enero de 2026. Así lo informó recientemente la compañía Rio 2, titular de la iniciativa, en una actualización de las actividades asociadas, las que se retomaron en octubre último tras obtener un paquete de financiamiento por US$150 millones.
Como su nombre lo dice, Fenix Gold corresponde a un proyecto de mineral de oro, cuya extracción se llevará a cabo a través de método convencional de explotación a rajo abierto, a una tasa de 20.000 toneladas por día (tpd).
El procesamiento de mineral incluirá una etapa de chancado primario, lixiviación en pila estática con solución cianurada y una recuperación de oro mediante un proceso con carbón activado, conocido como ADR (adsorción, desorción y regeneración), a partir del cual se obtendrá una solución apta para la electroobtención de precipitado oro, que será finalmente fundido para la obtención de barras de metal doré.
Recursos minerales
De acuerdo con información proporcionada por la compañía, el proyecto abarca una zona mineralizada que tiene una longitud de 2.500 metros, 750 metros de ancho y una profundidad de hasta 600 metros. Es un yacimiento de óxidos de oro, sin evidencia de mineralización transicional o de sulfuros. Los estudios metalúrgicos indican que la composición del oro es de alta pureza, con un promedio de 99% Au.
La estimación de recursos minerales se actualizó en 2023 a partir de datos recopilados desde 91 sondajes diamantinos, 282 perforaciones de circulación inversa y dos sondajes combinados (perforaciones realizadas entre 2010 y 2022), además de muestreo superficial. Los recursos (y reservas) totales, medidos e indicados, se estiman en 4,8 millones de onzas, equivalentes a 389,2 millones de toneladas métricas con una ley de 0,38 g/ton.
Producción
La tasa planificada de colocación de mineral a la pila será de 12.000 tpd durante el primer año, que se incrementará a 20,000 tpd una vez que alcance la producción máxima. Para los primeros 12 años, se estima una ley promedio del mineral de 0,54 g/t Au, con una producción promedio de 91 Koz de oro recuperado. “Durante estos años, el cronograma minero alcanzará la tasa máxima anual de extracción de 21 Mtpa”, ha sostenido la compañía titular del proyecto.
Entre los años 13° y 17°, el 100% de la producción de oro se obtendrá del remanejo del mineral de las pilas de acopio, con una ley promedio de 0,30 g/t Au, produciendo un promedio de 54 Koz de oro recuperado.
Energía y agua
Se suministrará energía al proyecto a través de generadores diésel. El acceso a la red pública de energía eléctrica se ubica a unos 25 km del sitio de la mina, en cercanías a la mina La Coipa, y se considerará la conexión a dicha red durante la fase de expansión de la mina de Fenix, posiblemente de manera conjunta con la implementación de tuberías de agua.
El proyecto requiere un suministro de agua de hasta 24 l/s, para lo cual la minera firmó un contrato con la empresa de servicios sanitarios Nueva Atacama, el principal proveedor de agua de la ciudad de Copiapó, para suministrar hasta 20 l/s de aguas residuales industriales tratadas desde su planta de tratamiento de Piedra Colgada. Las necesidades adicionales de agua se completarán con un pozo de 5 l/s.
Como parte de la futura expansión del proyecto, se considera la construcción de una red de tuberías desde las instalaciones de Nueva Atacama hasta Fenix Gold a lo largo de la carretera principal existente. Para ello, la compañía minera está llevando a cabo conversaciones con empresas de infraestructura que estén interesadas y puedan financiar y construir esta red de tuberías, así como con otras mineras que deseen compartir el beneficio de la misma.
Paralelamente, la compañía está estudiando opciones adicionales de suministro de agua, tales como derechos de agua subterránea permitidos y no utilizados ubicados más cerca de las operaciones mineras, con el objetivo de optimizar el suministro hídrico.
Estado de avance
De acuerdo a la más reciente actualización entregada por la empresa, las actividades de construcción del proyecto se reiniciaron en octubre pasado, mes en que logró completar con éxito un financiamiento de deuda y capital.
En diciembre de 2023 fue aprobado el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) del proyecto, tras un proceso de apelación que se prolongó por 18 meses frente al rechazo inicial que tuvo el EIA. Antes de ese rechazo, en 2022 comenzaron las actividades previas a la construcción del proyecto, que involucraron:
-Pedido y obtención de artículos de larga duración para la construcción de la planta de ADR y la infraestructura asociada.
-Fabricación de componentes de plantas ADR, como tanques y zapatas de cimentación de plantas ADR.
-Construcción de un campamento para 565 personas y comedores y oficinas asociados en el sitio de infraestructura de Lince, ubicado a 20 km de la zona de la mina.
-Instalaciones de carga de agua en las dependencias de tratamiento de agua de Nueva Atacama ubicadas en Copiapó.
Se estima que el gasto de capital de construcción proyectado para 2025 será de US$122 millones, esperándose que el proyecto esté completamente construido en noviembre de 2025. La primera producción de oro está prevista para enero de 2026.
Expansión futura
Según un estudio interno preliminar realizado por el equipo técnico de Rio2, Fenix Gold tiene un potencial de expansión desde 20.000 tpd de su primera etapa, hasta una tasa de extracción de mineral de alrededor de 80.000 tpd. Este aumento elevaría la producción de oro desde unas 100.000 onzas por año a un rango de 250.000 a 300.000 onzas por año, ha comunicado la empresa.
Para cuantificar y justificar esta posible expansión, la compañía inició un estudio de expansión minera que prevé finalizar a fines de 2025. En ese análisis se evaluarán las opciones de agua a largo plazo y se seleccionará la estrategia de suministro hídrico óptima, que constituirá un caso base para la economía del proyecto. En esa línea, Rio2 anunció la realización de estudios base para un estudio de EIA sobre el proyecto, el cual estaría listo hacia el cuarto trimestre de 2026 para ser revisado por la autoridad ambiental de la Región de Atacama.