Producción de cobalto en Chile: potencial para un mineral estratégico
De acuerdo con el investigador Brian Townley, existe un potencial para producir unas 10 mil a 15 mil toneladas métricas por año, lo que dejaría al país como segundo productor de cobalto en el mundo.
En Chile existen distritos con potencial para la minería del cobalto de pequeña y mediana escala. Esa fue una de las conclusiones de un estudio realizado a fines de la década pasada por tres investigadores del Advanced Mining Technology Center (AMTC) de la Universidad de Chile, a solicitud del Comité de Minería No Metálica de Corfo, en que se evaluó el estado de los recursos minerales por cobalto en el territorio nacional y las perspectivas para su exploración y explotación.
Sus conclusiones siguen plenamente vigentes y cobran mayor interés en un mundo que espera transitar hacia la descarbonización energética, para la que el cobalto es considerado uno de los minerales críticos. De hecho, la compañía Capstone Copper, por ejemplo, quiere aprovechar el cobalto de sus yacimientos Mantoverde y Santo Domingo, y tiene planes de levantar una planta de producción de Co en el mediano plazo.
De acuerdo con el estudio “Potencial de Exploración y Explotación de Recursos Minerales de Cobalto en Chile”, los distritos históricos –en que se explotó este mineral hasta mediados del siglo pasado– siguen presentando potencial para minería de mediana escala. En ese sentido, se destaca que los principales distritos son los de San Juan y Carrizalillo Alto en la Región de Atacama, así como el de Tambillos en la Región de Coquimbo.
“La exploración por cobre-oro-cobalto en estas regiones muestra potencial para pequeña a mediana minería, para explotación de cuerpos de vetas, brechas y mantos en la cordillera de la costa de la franja ferrífera de Chile”, concluyó la investigación.
Al respecto, Brian Townley, profesor del Departamento de Geología de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile e investigador del AMTC (y uno de los líderes del referido estudio), los yacimientos de cobre-cobalto son los más relevantes, y en aquellos de vetas mesotermales en los distritos de San Juan, Las Cobalteras y Carrizal Alto, el cobalto podría ser un co-producto.
Al distrito de Tambillos de la Región de Coquimbo, añade Las Merceditas, en la Región Metropolitana (sector El Volcán, Cajón del Maipo). “En estos casos son yacimientos de cobre o de hierro-cobre, en que el cobalto es un sub-producto”, precisa.
Asimismo, Townley sostiene que otra potencial fuente de Co son los yacimientos del tipo óxidos de hierro-cobre-oro (IOCG, por su sigla en inglés), como los existentes en la Región de Atacama: Candelaria, distrito Punta del Cobre, Mantoverde, Santo Domingo, entre otros. Asegura que en ellos hay “concentraciones significativas de cobalto, presente principalmente en el mineral pirita, actualmente considerado un mineral de ganga en estos yacimientos”, pero que es posible aprovechar.
Sobre ese punto, menciona un proyecto de Tecnologías Avanzadas de Fondef (Agencia Nacional de I+D), liderado por el Centro de Sistemas Biotecnológicos de la Universidad Andrés Bello y que encabeza la Dra. Pilar Parada, en colaboración y co-ejecución con AMTC/Geología/Ingeniería de Minas de la FCFM: “Mediante avances y escalamientos tecnológicos en los que estamos trabajando, en particular biolixiviación, buscamos recuperar cobalto desde pirita, lo que permitiría de paso evitar que este mineral, generador de drenaje ácido, llegue a los relaves”, puntualiza.
También destaca los impactos positivos que la producción de cobalto tendría en el desarrollo minero local, en términos de diversificación e impulso de una minería de menor escala: “En la Región de Atacama existe un abundante número de yacimientos del tipo IOCG de pequeña minería, yacimientos en los cuales el cobre y/o hierro no se encuentran en concentraciones suficientemente altas como para sustentar actividad minera. Recuperar cobalto como un subproducto puede cambiar la ecuación, lo que potenciaría la actividad de la pequeña minería, como proveedores de menas mixtas, Cu-Fe-Au-Co. Tener plantas de beneficio que puedan recuperar múltiples metales otorgaría un fuerte impulso a este sector”, remarca.
Chile sería segundo
¿Qué nivel de producción podría alcanzar Chile si se explotaran los depósitos de cobalto existentes? Brian Townley explica que si se consideran las masas totales en proceso en los yacimientos IOCG, el total de cobalto recuperable es significativo, pudiendo llegar a 5.000 toneladas métricas por año. “Si se suman los yacimientos de cobre-cobalto, Chile tiene un potencial para producir unas 10 mil a 15 mil
toneladas métricas por año”, estima, aunque cree difícil llegar a una producción industrial en un plazo menor a cinco o diez años.
El profesor hace ver que, en caso de alcanzar las 10 mil toneladas anuales, el país se posicionaría como segundo productor a nivel mundial, considerando que Indonesia produce 9.000 ton/año, aunque muy lejos del que lidera este mercado, República Democrática del Congo (RDC), con 145 mil toneladas/año.
Consultado por las ventajas comparativas que presenta Chile, subraya que “es un país minero tradicional y de larga trayectoria, con buenas prácticas en minería sostenible y ética, lo que es atractivo para compradores respecto de RDC, país en el cual las prácticas de explotación minera son cuestionables, por decir lo menos”.
En ese sentido, el académico comenta que muchos países están tratando de diversificar las fuentes de suministro de cobalto, buscando aquellas confiables, que se apeguen a una minería más sustentable y trazable, y que respeten las normas del libre mercado.
Demanda del cobalto
Hoy el cobalto está dentro de la categoría de minerales críticos/estratégicos. “Todo recurso que es considerado de uso tecnológico masivo y de demanda
incremental en el mundo, y cuya fuente es reducida a escasos
productores, ingresa a esta categoría”, plantea Townley.
Sus principales usos y/o aplicaciones se dan en la producción de baterías, aleaciones de acero, tecnologías de comunicación, entre otras. “La principal demanda global por cobalto es por su uso en baterías, la cual se espera aumente fuertemente con el ingreso creciente de la electromovilidad”, indica el investigador.
Observa que el precio del cobalto ha tenido un comportamiento volátil, situándose hoy en un valor cercano al que tuvo en 2016 (US$26.000/ton), luego de un peak en 2022 (US$80.000/ton aproximadamente). “Estimo que, considerado un aumento progresivo de la demanda en el tiempo, el cobalto pudiera superar, a mediano plazo, los US$30.000/ton, pero actualmente se encuentra a la baja”, dice. Y junto con ello advierte que este mercado es muy dependiente de los desarrollos tecnológicos y que la aparición de nuevas tecnologías de baterías es su principal amenaza.
Las imágenes están contenidas en la presentación “Recursos Minerales por Cobalto en Chile, potencial de exploración y explotación minera”, de Brian Townley, Alejandro Díaz y Rodrigo Luca.