La minería es una industria que está inserta de una manera a veces invisible en nuestro diario vivir y que, evolucionando en forma sustentable, nos proporcionará los elementos para enfrentar el cambio climático.

Por Iván Violic, socio de Voces Mineras A.G.

Imaginemos la escena de una familia comprando helados en una tarde calurosa. Mientras los padres se encargan de pagar y conversar de la contingencia, los hijos están conectados a su celular, para contarles a sus amigos lo delicioso de los helados y coordinar la hora para el carrete de la noche.

Ninguno tiene la menor idea de que este momento de disfrute y relajo es posible gracias a la minería, que extrajo de la tierra los metales que se usaron para construir él galpón de ese local, las máquinas donde se hacen los helados y los celulares con los cuales se conectan.

Después se suben a un auto construido de diversos metales en su carrocería y en su electrónica. Al llegar a casa abren la cerradura con una llave metálica y en su interior están todos los artefactos: cocina, lavadora, microonda, hervidor eléctrico y otros, fabricados con metales extraídos por la minería, sin olvidar la conexión al imprescindible Wi-Fi.

Algunos dirán que también hay muebles de madera natural, pero no reflexionan que para producir la madera se usan sierras metálicas y herramientas, y que ésta es transportada en camiones, también construidos con diversos metales.

Por lo tanto, la minería es una industria que está inserta de una manera a veces invisible en nuestro diario vivir y que, evolucionando en forma sustentable, nos proporcionará los elementos requeridos para solucionar la crisis del cambio climático.

Así es que la próxima vez que se tome un helado, agradezca a los esforzados mineros, que en los lugares más inhóspitos extraen los metales para que podamos gozar de las comodidades de la vida moderna.