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Fundiciones: vías de solución frente a sus múltiples desafíos

División El Teniente, Codelco

Los socios de VVMM Juan Rayo y Alexander Leibbrandt coinciden en que la industria debe actualizar sus tecnologías para alcanzar mayores niveles de captura de emisiones, y advierten sobre el riesgo del dominio de China en este mercado, frente a lo cual delinean algunos caminos a seguir.

Una de los temas que ha levantado la asociación Voces Mineras (VVMM) es la necesidad de abordar los desafíos que el país tiene en la industria de fundiciones. Ello, considerando que la producción de concentrados en Chile seguirá aumentando mientras la pérdida de competitividad de nuestras fundiciones seguiría profundizándose, así como aumentaría la dependencia de otras plantas, principalmente de China.

Al respecto, conversamos con dos socios de VVMM, especialistas en la materia: Juan Rayo y Alexander Leibbrandt, quienes coinciden en que el sector debe actualizar sus tecnologías para alcanzar mayores niveles de captura de emisiones y de recuperación de metales, y advierten sobre el riesgo del dominio de China en este mercado, frente a lo cual delinean algunos caminos a tomar.

“Desde el punto de vista de mercado, nuestras fundiciones no serían estratégicas, salvo para aquellos concentrados que no se pueden vender o que son difíciles de vender”, opina Leibbrandt, refiriéndose en particular a la fundición de Chuquicamata, porque “vender ese concentrado al final es más caro que fundirlo acá”.

Fundición Paipote, Enami

También rescata la fundición Hernán Videla Lira (Paipote), de Enami, porque trata los concentrados de los pequeños mineros, ejerciendo un rol de fomento de la actividad minera en localidades que dependen de ella. Sin embargo, dado que ésta se ubica en la misma zona que la fundición de Potrerillos, de Codelco, que está en una situación compleja, recomienda fusionarlas en una sola e invertir en su optimización. Ello, además, sería un camino alternativo al proyecto de la nueva fundición de Enami, el cual involucra una alta inversión (más de US$700 millones), “sin una rentabilidad asegurada”, hace ver Leibbrandt.

Adicionalmente, sostiene que en Paipote se podría invertir en una planta de ácido, tecnológicamente actualizada, y llevar el metal blanco –que contiene 70% cobre– a las otras fundiciones para que en ellas se termine de procesar.

Desventajas

Para Alexander Leibbrandt, lo que hasta hoy era una ventaja, en el futuro se perderá: por la menor producción de cobre de electroobtención, se tendrá que exportar ácido sulfúrico a un costo alto. En contraste, las fundiciones chinas tienen un mercado asegurado, en sus plantas de fertilizantes.

Como otro factor negativo menciona el nivel de tecnología de las fundiciones locales: “Es antigua y no ha sido actualizada. Seguimos con una recuperación de metales mucho más baja que la que tienen chinos, japoneses y alemanes. Además, ellos tienen un mercado secundario, que es el procesamiento de chatarra, y eso los hace más competitivos”.

¿Qué estrategia debería tener Chile hoy? “Mantener celosamente una alternativa abierta en caso que haya un dominio externo. Porque la independencia es importante. Pero ese riesgo no es inminente ni obliga a hacer hoy una nueva fundición. Las que tenemos hay que actualizarlas y hacerlas competitivas, invertir para que no sean tan costosas”, asevera Leibbrandt.

Fallas de gestión

Fundición Potrerillos, División Salvador, Codelco

“Mi visión es mala, pero no es catastrófica”, afirma por su parte Juan Rayo, para quien las fundiciones que tienen problemas serios en Chile son las estatales. “La nueva legislación no fue bien manejada por al menos tres de las grandes fundiciones estatales, lo cual ha implicado paralizaciones importantes. Estamos hablando de Chuquicamata, Salvador y Teniente. Fue una falla de gestión de Codelco no haberlas tenido debidamente habilitadas para cumplir el DS28 en la fecha comprometida”, observa.

“En todos los lugares del mundo las fundiciones se han ido adaptando a las normativas sin grandes problemas”, recalca.

Pero más allá del cumplimiento de la norma, Rayo hace notar que principalmente hay tres grandes desafíos que enfrentan nuestras fundiciones: productividad, eficiencia y tecnología. “En algunos años ciertas fundiciones de Codelco llegaron a tener costos equivalentes a 45 centavos de dólar por libra de cobre, lo cual está varias veces por encima de las mejores fundiciones del mundo. Eso da cuenta de una brecha enorme, que se puede reducir si hay una gestión adecuada y una adaptación tecnológica apropiada”, sostiene.

Enfatiza que la productividad se mejora con gestión, exigiendo compromiso, eficiencia y un buen estándar operacional. Y las tecnologías deben ser las más convenientes para cada uno de los procesos, para tener buenos resultados comerciales y menor impacto ambiental. “En Europa hay fundiciones que tienen vereda, es decir, las personas circulan al lado. Una fundición así sería aceptada por la comunidad, daría trabajo, producto y riqueza. Chile debe ir hacia una mejora tecnológica, para una buena minería, que tenga cero contaminación”, subraya.

Dos caminos

División Ventanas, Codelco

Como soluciones para una mejor industria de fundiciones, Juan Rayo esboza dos caminos: “Uno es que Codelco tome el toro por las astas y haga una modificación radical en la gestión de sus fundiciones, eliminando todos los vicios laborales que existen. Y otra solución es crear una empresa fundidora mixta –mitad estatal, mitad privada–, independiente de la gestión de las minas y plantas. Y que esta empresa tenga el concentrado garantizado de las minas y tenga aportes de privados para hacer las inversiones que se requieren”.

A su juicio, una empresa mixta puede ser mucho más eficiente, con un directorio empoderado y enfocado en lograr las utilidades adecuadas. Además, teniendo el abastecimiento asegurado, dice, el mayor riesgo del negocio está resuelto.

Asimismo, comenta que “una fundición no tiene por qué tener los índices de rentabilidad que tiene la minería, pero esos índices podrían ser atractivos para que las AFP o similares inviertan”.

¿Hay que seguir apostando por las fundiciones? “Nosotros no podemos ser exportadores solamente de piedras. Chile tiene que subir su nivel, porque si no, pasaremos a ser dependientes de terceros. Si China finalmente abarca más del 60% de toda la gestión de fundiciones, como pretende hacerlo, podrá colocar el valor que quiera a sus productos. A la larga, en vez de pagar cargos de tratamiento de 20-30 centavos, vamos a pagar 30-40 centavos. Chile tiene que tener cierta capacidad de fundición, para evitar que el mercado abuse de nuestros productos”, advierte.

Agenda de Voces Mineras

Este tema fue abordado ampliamente hace un año en el Foro “Hacia una política nacional de fundiciones”, organizado por Voces Mineras, con el objetivo de aportar opiniones expertas que contribuyan a la formulación e implementación de una política pública en este ámbito. Revise aquí las propuestas y conclusiones que se presentaron: http://vvmm.cl/?p=1876.

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